• 225 gramos mantequilla blanda
• 140 gramos azúcar extra fino
• 1 yema de huevo ligeramente batido
• 1/2 cucharadita esencia de vainilla
• 280 gramos harina
• Sal
Para decorar:
• 200 gramos azúcar glas
• Colorantes alimentarios
Utensilios:
• Bandejas
• Bol
• Cortapastas
• Espátula
• Papel de hornear
• Papel film
• Rejilla de metal
• Rodillo
Preparación
Pon la mantequilla y el azúcar en un bol y mezcla con una cuchara de madera. Añade la yema y la esencia de vainilla mientras bates.
Tamiza la harina y una pizca de sal sobre la mezcla y remueve hasta que no queden grumos.
Divide la masa por la mitad y forma dos bolas. Envuelve en papel film y deja reposar en la nevera entre 30 y 60 minutos.
Precalienta el horno a 190ºC y forra dos bandejas con papel de hornear. Desenvuelve la masa, y extiéndela con un rodillo entre dos hojas de papel de horno hasta lograr una lámina de unos 3 mm.
Corta las galletas con un cortapastas en forma de estrella y colócalas en las bandejas dejando espacio entre ellas.
Hornea por 15 minutos, hasta que se doren. Una vez fuera del horno, deja reposar en la bandeja de 5 a 10 minutos y, con una espátula, pásalas a una rejilla hasta que se enfríen.
En cuanto a la decoración, echa el azúcar glasé tamizado en un bol y añade 2 cucharadas de agua tibia hasta que la mezcla tenga la consistencia de una crema espesa .
Reparte el glaseado en 3 ó 4 boles y añade unas gotas de colorante a cada uno.
Cubre las galletitas colocadas sobre una rejilla con los distintos colores hasta los bordes y, antes de que se seque, coloca la decoración elegida.
Por último espera a que el glaseado se encuentre en su punto y se solidifique.
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