3 1/2 tazas de harina
2 cucharillas de jengibre molido
1 cucharilla de bicarbonato de sodio
1 cucharilla de canela molida
1/2 cucharilla de nuez moscada
1/4 cucharilla de clavo de olor molido
1/4 cucharilla de sal
3/4 taza de mantequilla
3/4 taza de azúcar
1/2 taza de miel de caña
1 huevo entero
Preparación:
En una fuente mediana mezclar la harina, jengibre, bicarbonato de sodio, canela, nuez moscada, clavo de olor y sal. Reservar.
En un recipiente grande batir con batidora la mantequilla con el azúcar hasta que tenga una textura cremosa. Incorporar la miel de caña y el huevo, batir hasta que quede homogénea. Agregar de a poco la mezcla de la primera fuente. Cuando haya dificultad para batir, terminar de incorporar el resto con las manos y amasar hasta unir todos los ingredientes.
Separar la masa en tres partes y ponerlas en bolsitas individuales bien cerradas o papel film. Llevar al refrigerador por 45 minutos.Precalentar el horno a 180 grados centígrados.
Espolvorear con harina la mesa, retirar las bolsas de masa del refrigerador y, con ayuda de un uslero, extender hasta tener un grosor de 2mm a 4mm. Usar cortadores de masa y formar las galletas. Ponerlas en una bandeja para hornear previamente untada con mantequilla, llevar al horno por 15 minutos o hasta que los bordes se hayan dorado.
Decorar según dicte la creatividad.
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